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Silvia Maraone profilo

Silvia Maraone

Silvia Maraone lleva años trabajando en campos de refugiados: conoce muy bien las rutas y estrategias que utilizan los inmigrantes para cruzar la frontera entre Bosnia y Croacia.

Escuchó por primera vez la llamada hacia Europa del Este en Milán, en 1992, de fondo, el eco de un conflicto, el yugoslavo, percibido como lejano y dos jóvenes, Miro y Mira, él serbio y ella bosnia, que se quedaron en su casa como huéspedes durante unos meses. Es precisamente su difícil relación con Miro lo que le dio la oportunidad de darse cuenta del gran trauma de los que han perdido su lugar en el mundo.

En 1993, a los 18 años, se hizo voluntaria y trabajó en Eslovenia, Bosnia, Kosovo y Serbia. Los refugiados de guerra y desplazados son muchísimos. Cuando la situación se normalizó, empezó la fase de reconstrucción. La situación se agravó de nuevo entre 2015 y 2016, cuando grandes oleadas de migrantes volvieron a cruzar la ruta de los Balcanes.

Al principio, los corredores humanitarios funcionaron muy bien, luego, con el cierre de las fronteras en 2016 y el acuerdo con Turquía para gestionar los flujos, este mecanismo se paralizó.

En la actualidad, Silvia trabaja en campos de refugiados de Serbia y Bosnia, prestando apoyo psicológico y social a los refugiados con el objetivo de reconstruir la esperanza de una normalidad que el viaje ha desmoronado en muchos casos.

 

Testimonio recogido en colaboración con Lorenzo Colantoni en el marco del proyecto "Italianos de Europa - Italianos de Oriente".

Cronología

  1. 1992

    Silvia Maraone comienza a informarse sobre el conflicto yugoslavo. Conoce y acoge a una joven pareja, Miro y Mira, él serbio y ella bosnia.

  2. 1993

    A los 18 años, se hizo voluntaria y trabajó en Eslovenia, Bosnia, Kosovo y Serbia.